lunes, 17 de febrero de 2014

Mbfw Madrid 2014; Cibelespacio.



  Fue un día muy duro. Después de 4 horas y media por fin llegué a Madrid. La verdad es que no me encontraba nada bien debido a que acababa de pasar una gastroenteritis muy severa que todavía arrastro pero la ilusión por llegar a la Mbfw de Madrid era más fuerte que yo.  No tenía mucha idea de lo que me iba a encontrar allí ni si merecía la pena acudir a su llamada ya que no tenía acreditación para ninguno de sus desfiles. Pero como era una misión imposible acceder a ver a mi admirado Francis Montesinos no perdí el tiempo en lamentarme. Había más cosas a mí alrededor…
El día era muy lluvioso y sólo llevaba un mini paraguas de bolso porque el pronóstico del tiempo decía que sólo llovería por la mañana…mejor no hago ningún comentario…El caso es que mis preciosas botas se calaron y  el bolso también. Cosas que pasan.
Pero por fin llegué. Una multitud se agolpaba a la entrada pero curiosamente dentro no había casi gente. Aunque la cola para dejar la bolsa y el abrigo era tremenda ¿Cómo puede haber una persona atendiendo? Terrible. La mujer no daba abasto y la gente que estábamos en la cola nos desesperábamos al ver aquello. “Mal empezamos”-pensé. Y continué allí de pie hasta que me tocó por fin.
Justo antes de acceder al recinto la gente se pegaba por coger alguna de las bolsas, botellas de agua o propaganda que sacaban unas chicas casi casi con cara de pánico jajaja. Parece mentira como se comporta  la gente cuando algo es gratis… Así que me subí a la escalera mecánica y por fin… ¡Cibelespacio!





Lo primero en que me fijé es que justo al lado de la puerta había otro lugar donde dejar la ropa (ya lo podían haber dicho antes) pero yo me lancé rápidamente a lo que interesaba. No había mucha afluencia de público y eso ya prometía. Lo primero que vi fueron los stands de los jóvenes diseñadores que nos dan la bienvenida con sus magnificas creaciones…a mi me enamoró totalmente Leyre Valiente. Una diseñadora transgresora con diseños llenos de color y originalidad. Me encantaría tener una de sus chaquetas de hombros destacados o el maravilloso chaquetón amarillo que parecía casi futurista. Me rindo a tus pies Leyre, espero poder disfrutar de alguno de tus desfiles algún día. Me emociono todavía al recordarlo y es que cuando lo que veo me parece tan bello…me llega directamente al corazón. La pena es que había gente en el stand y no pude felicitarla y llevarme una foto con ella que me habría hecho mucha ilusión.” Más tarde lo volveré a intentar “y me adentré en el recinto.

Los stands se agrupaban a lo largo del recinto y con ellos las colas. En su mayoría era para recoger ejemplares de revistas como Glamour que sacaban una caja y de repente las adolescentes se pegaban por una…así que continué mi camino hacia el stand de Solan de cabras y disfruté de un zumito riquísimo mientras me masajeaba los pies mojados por la lluvia.



Más adelante visité a Rowenta donde hice el intento de llevarme algún premio pero que no conseguí. También te peinaban con una de sus maravillosas planchas de pelo o te hacían una foto. Este me pareció el mejor stand del recinto.







Por otro lado, el mejor lugar para descansar era el de Mercedes Benz donde podías tomar algo y sentarte en uno de sus bonitos asientos donde disfrutar del desfile en su pantalla gigante.

Por lo general me pareció bastante decepcionante por lo que me centré en disfrutar del más puro Street style que continuamente desfilaba a mi alrededor. Allí mirar y que te miren es lo normal…aunque, sinceramente, a muchas de las adolescentes que allí se encontraban las habría prohibido la entrada ya que sus malos modales (empujones, gritos, poca educación en las colas etc.…) incomodaron a mas de un asistente. El estilo no sólo es una cuestión estética chicas…

Y ya con los pies “hechos un higo” no tengo más remedio que pensar en marcharme a Madrid para comer y pensar en coger el autobús de vuelta a Bilbao (otras 4 horas y media). Pero antes una última visita al stand de Leyre Valiente…que está más lleno todavía. Triste y cabizbaja y con la cámara en mano me dirijo hacia la salida y  me cruzo con Juan Miguel (el ex marido de Karina) que me sonríe y con el que me hago la foto que veis aquí.



 Y así termina mi visita. Me fui sin ver a Francis Montesinos y sin una foto con Leyre Valiente. Decepciona y agotada porque llevaba desde las 4:30 A.m. en pie me dirijo hacia mi asiento del bus y pienso si ha merecido la pena…

3 comentarios:

  1. Seguro que si te mereció la pena.Nosotras también tenemos un blog, http://amigasyresidentesenstylestation.blogspot.com.es/ si te apetece pásate y si te gusta no dudes en seguirnos

    Besitos

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    Respuestas
    1. El armario de Shauria17 de febrero de 2014, 18:39

      Siempre me quedo con lo bueno pero cuando algo te hace tanta ilusión y no lo consigues la decepción te lleva a plantearte todo. Gracias por entrar y dejar tu opinión. Visitaré tu blog. Un beso

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  2. Animo !!! Tu puedes más que esta decepcion.
    Eres capaz de conseguirlo, tu sabes como !!

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