A estas alturas de la película los que me seguís o me conocéis
ya sabréis que no soy una de tantas blogueras esqueléticas que infectan la Web. No lo soy ni de
fachada ni de pensamiento, y no quiero parecerme tampoco.
En mi último look mi aspecto lucia más rellenito. Incluso
mis curvas femeninas eran muy evidentes. Pero es que yo, soy así.
Meses atrás con un peto vaquero mi delgadez me hacia sentir
fea e incomoda…Pero es que yo, soy así.
Hace unos días viendo la televisión escuche como una famosísima
bloguera española decía que hacer ejercicio era fundamental para cuidar la
salud y el aspecto porque viven de su imagen. Y coincido en que sea saludable, faltaría
mas…Pero que una imagen, tan delgada, venda, lo siento pero no lo comparto.
Este fenómeno de
estar rozando la enfermedad es muy habitual entre los diseñadores mas famosos
que solicitan modelos con unas medidas extremas para la altura. Modelos de
mujeres que aparentan estar enfermas y que, debido a su repercusión mediática,
se convierten en ejemplo a seguir para las miles y miles de seguidoras que viéndolo
algo normal y atractivo, lo copian hasta la muerte. ¿Y os parece normal? ¿Qué
tienen esos cuerpos de bonitos? ¿Acaso tienen forma femenina? Yo no soy un perchero de la habitación. Tengo
pechos, culo y cintura. Y lo se, no soy perfecta. Pero cuando comencé ha hacer
este blog fue con la única intención de aportar ideas a la gente normal. De
ayudar a conjuntar diferentes opciones según el estado de animo de cada día.
Actualmente no hago publicidad ninguna de nada. Ni llevo ropa hipercara que
arruine mi cuenta bancaria. Tampoco compro pieles reales de animales ni
taconazos que supongan un perjuicio a la salud. Y me disgustan los escotes,
mini faldas o transparencias extremas que son más propias de una persona
ordinaria que de alguien con mucho estilo. Pero es que yo, soy así.
No tengo un blog famoso en el que las seguidoras aplauden un
vaquero y una camiseta como si fuera el look del siglo. No tengo miles de
seguidores en Instagram (ni tampoco los voy a comprar). No voy a pagar un
dineral para que Face me haga publicidad. No contrataré un fotógrafo
profesional que me haga sentir una DIVA que no soy. ¿Y sabéis por qué? Porque yo, soy así.
Y ahora me podéis criticar. E incluso habrá quien me insulte
quizás por verse retratada en mis líneas pero confío en que mis palabras hagan
reflexionar a aquellas que, en un primer impulso, me habrían mandado a recoger
coles. Solo deseo que aquellas de vosotras que fielmente seguís a las blogueras
de moda, lo hagáis con cabeza y seáis conscientes de que ni tenéis su cuerpo,
ni su dinero…y si la copiáis, tampoco su estilo.
No intentéis calcar el look del día y quedaos solo con lo
que os sintáis realmente identificadas. Cada una de vosotras tiene unos gustos
diferentes, una anatomía diferente y un cerebro diferente ¿por qué vestís
iguales? Quizá el que compréis todas en
la misma cadena de tiendas tenga algo que ver. “Se lleva una maceta en la
cabeza”…y vais todas corriendo a enriquecer al dueño de la tienda que vende
macetas de cien en cien porque las ovejas son parte del mismo rebaño. Y voy por
la calle y pasa una con una maceta y dos
pasos después otra y otra…Y sonreís de felicidad porque habéis comprado lo que
se lleva, por supuesto, en la tienda que se lleva. Y mientras tanto dejáis de
lado tiendas a las que ni entráis con la escusa de que no os gusta la ropa y
nadie lo hace. Creo que no hace falta que diga nada mas ¿verdad?
Espero que este post pueda servir de algo. Incluso desearía
que aquellas personas que han comenzado a leer lo terminen y reflexionen pero,
me temo, que esto ya es mucho desear. Te doy las gracias a ti por haber tenido
la suficiente inteligencia para terminar
mí improvisada verborrea y así poder realizar una crítica con conocimiento.
A ti por haberme dedicado unos minutos de un tiempo que jamás recuperarás y que
por ello es tan valioso. Y, en definitiva, a ti, por que sin ti…nadie sabría
que YO, soy así.