|
Modelo de tallas XXL; Tara Lynn. |
¿Carne con o sin hueso? Para una gran parte de los amantes
de la carne sólo es concebible un buen chuletón con mucha carne y poco hueso y
para los que no nos gusta mucho la carne, pero nos pidieran que la dibujásemos,
lo haríamos del mismo modo.
Esta es una reflexión mía en momentos de filosofía personal
sin ninguna transcendencia cuya conclusión es que un chuletón es más apetecible
si lo visualizamos con mucha carne y poco hueso que a la inversa. Incluso en
los dibujos animados aparece con frecuencia una enorme chuleta con un hueso muy
pequeño porque saben que sólo así provocarán
nuestro apetito. En realidad no estoy diciendo
nada nuevo pero si esta obviedad es de conocimiento universal ¿por qué los
medios audiovisuales y las pasarelas más relevantes del planeta insisten en
vendernos huesos?
Haced una prueba…poned en vuestro buscador de Internet “modelos
extremadamente delgadas” y descubriréis como la mayoría de las webs que
aparecen hacen relación a que Israel prohíbe la contratación de modelos muy
delgadas. Por fin una buena noticia aunque parándome a pensar ...qué triste que sea noticia que un país haga lo que todos debieran hacer...Pero¿por qué lo ha hecho? Debido a la increíble influencia que ejercen sobre las
adolescentes ya que las ven como un ejemplo a seguir sin pararse a pensar que
muchas de las imágenes que vemos son más propias de un libro de medicina. Vivimos en un mundo que marca el prototipo de mujer hermosa, lo vemos
en todos sitios, no es un secreto. Sin embargo, cuando el equilibrio de la
balanza se inclina demasiado aparece la extrema delgadez y la anorexia. Es
curioso como para grandes diseñadores la enfermedad puede resultar no solo
bella sino también imitable. Recordemos las palabras del diseñador de Chanel
Karl Lagerfeld cuando
rechazaba contratar
a la bellísima modelo de tallas XXL, Tara Lynn:
" Las que critican a las modelos por aparecer huesudas o anoréxicas son las típicas madres gordas que se sientan en el sofá todo el día comiendo papas fritas".
Increíble. Sr. Lagerfeld. Yo soy ama de casa desde hace 16
años, tengo 39 años, mi estatura es de 1,65cm y mi peso es de 58kg. Para
cualquier persona estoy delgada aunque probablemente para usted estaré gorda. Soy
una mujer que presume de sus cuerpo, de sus curvas y de su carne porque la
naturaleza exige que nos alimentemos para que el metabolismo funcione y no
enfermemos. Usted debe de ser de otro planeta ya que entiende que no hay que
alimentarse para así enfermar y que todo el mundo admire el esqueleto y
el bello tono morado de las ojeras ,tan de moda
en las últimas tendencias. Esos rasgos, le informo, no son sino una señal de
alarma que el cuerpo muestra para que se reaccione ante la catástrofe. Pero hay
algo que me preocupa más que perder el tiempo ante lo imposible, y es que
¿Por qué un país es capaz de prohibir la
imagen que proyectan estas modelos adolescentes y no se castiga a quienes las ensalzan?
Estas adolescentes están en lo
mejor de su existencia aunque tan sólo con mirarlas parecen no albergar
casi vida. Y me siento culpable. Culpable por haber admirado el trabajo de todos y cada uno de los diseñadores que han
permitido que ocurra esta barbarie. Aún así no pierdo la esperanza en que el
ingenio de estos creadores tenga sus límites mucho más allá de sus talleres.
Hoy mi voz apenas se
oye, es casi muda. Ayúdame con la tuya y pronto seremos audibles.
Quizás
sea una soñadora que todavía quiere cambiar el mundo, sin embargo,estoy muy despierta
cuando
expreso,
que un buen chuletón debe tener más carne…que hueso.